Historia de la cachimba, shisha
La shisha (Narguile, hookah, pipa de agua cachimba), tiene una historia amplia e interesante. Se dice que la costumbre de fumar en pipa comenzó en la India hace aproximadamente unos quinientos años. Sus comienzos fueron primitivos, utilizando en vez de cristal en la base, cáscaras de coco. La arguila es un fenómeno social extendido a lo largo y ancho del planeta, teniendo una mayor influencia y número de usuarios en Oriente. Es usado por millones de personas diariamente, sin discriminar sexo, raza o religión.
El fumador de shisha
es usualmente una persona paciente, inteligente y culta, que toma este momento
para charlar y pensar profundamente en diferentes aspectos de la vida diaria,
acompañado por familiares y amigos, que gustan de una amena charla, siempre
acompañada de un buen te oriental o un buen café.
Desde hace unos años
han proliferado los bares (Hookah Bars) en Occidente, que ofrecen la
oportunidad de disfrutar de una cachimba. Ciudades como Londres, Paris, Los
ángeles, etc. acogen a un gran número de aficionados a este interesante
pasatiempo. Es usual encontrar en bares y teterias a lo largo del mundo a estos
aficionados jugando a las cartas, backgamón y dominó, charlando durante horas y
dejándose llevar por los afrutados y deliciosos aromas que las shishas ofrecen.
Tabaco.
El tabaco fumado en cachimba no es ni parecido al tabaco que
encontramos en cigarrillos, puros o picadura para liar. El tabaco es conocido
como Mu´essel o Molasses, esta compuesto por finas hojas de tabaco lavado
muchísimas veces para que sea mas suave, mezclado con miel o derivados de la
misma, además de sustancia que proporcionaran sabor y olor a nuestro tabaco.
Fumar en cachimba proporciona una sensación suave, inspiradora y totalmente
diferente.
Encontramos una
amplia variedad de marcas y sabores, que pueden ir desde 2 manzanas el más
popular, hasta sabores como cereza, uva, melón, sandia, y hasta coca cola.
Una sesión para fumar
puede variar con la calidad del tabaco, el carbón y el número de personas que
fumen, pero puede ir desde una media hora hasta dos horas aproximadamente.
Preparando tu cachimba
1.- Llena la base con agua, aproximadamente dos o tres
centímetros por encima del tubo. Esto es esencial para que el humo se filtre y
haga las características burbujas.
2.- Ensambla la pipa, es decir introduce la parte de metal
en el cristal comprobando que no queden huecos o entradas de aire.
3.- Pon la manguera en su lugar, procurando también que no
hayan entradas de aire. Es importante que no hayan entradas de aire para que
cuando halemos por la manguera el carbón combustión e adecuadamente y caliente
el tabaco sin quemarlo.
4.- Por ultimo debes colocar una cantidad adecuada de
tabaco, previamente separado o desmenuzado en el barro o cacerola. No presiones
mucho el tabaco, ni pongas mucha cantidad pues debe haber espacio para que
entre aire y que como dijimos anteriormente el carbón se caliente
adecuadamente.
5.- Ahora coloca una lamina de papel aluminio o foil,
ajústalo de manera que quede bien tenso, puedes poner dos si el aluminio no es
de buena calidad, ahora debes abrir los agujeros, uno central ancho y ahora una
gran cantidad de agujeros mas finos.
6.- Ahora y por ultimo enciende tu carbón, si es natural lo
puedes poner sobre cocina de fuego, o vitroceramica, si es de encendido rápido solamente
acércalo a una llama y espera a que este al rojo vivo, ahora colócalo sobre el
papel aluminio y ¡¡¡¡A DISFRUTAR!!!!
Trucos y consejos
1.- Guarda tu tabaco en la nevera, en épocas calurosas para
conservarlo por mas tiempo.
2.- Pon hielo en la base, para un efecto refrescante en la
fumada.
3.- Mezcla bebidas de colores (Rives, licores como menta,
manzana) para probar nuevos sabores y dar un efecto curioso a tu cachimba.
4.- Prueba utilizar zumos mezclados con el agua, para fumar
con tabacos del mismo sabor. Por ejemplo, tabaco de naranja y zumo de naranja
en la base.
5.- Cambia el agua de tu cachimba cada vez que fumes,
prolongara la vida de la misma y el sabor será mucho mejor.
6.- Abre la mayor cantidad de agujeros en el papel aluminio,
para que el carbón caliente mejor.
7.- Coloca el carbón en los bordes primero para a medida que
fumes lo acerques al centro, esto permite que el tabaco caliente uniformemente
y no se queme.
8.- No excedas la cantidad de tabaco, ni lo presiones contra
la cacerola para evitar que se tapone.
9.- Puedes poner diferentes líquidos mezclados con agua en
la base, por ejemplo miel, whiskie, licor, leche, etc.